Apoyo en la negociación de arrendamientos para proteger a los propietarios

Plazo de arrendamiento

Un contrato de alquiler que fije las expectativas y aborde las cuestiones habituales relacionadas con el arrendamiento durante su vigencia puede ayudarle a evitar conflictos con los inquilinos y a prevenir vacíos inesperados en los alquileres, independientemente de las condiciones del mercado.

¿El contrato de alquiler debe ser mensual, de 6 meses con prórrogas, de un año entero o de otro tipo?

Elegir el plazo adecuado para su contrato de arrendamiento es un equilibrio entre riesgo y recompensa. Los arrendamientos mensuales ofrecen flexibilidad, pero pueden sacrificar la estabilidad de los ingresos en función del mercado actual. Un arrendamiento largo puede proporcionar un flujo estable, pero puede ser un problema si un inquilino resulta ser problemático. Sin embargo, un buen inquilino sería perfecto para un contrato de dos años.

¿En qué fecha, concretamente, debe empezar y terminar el contrato de alquiler?

Para evitar problemas relacionados con el prorrateo del alquiler, los plazos de preaviso, los recargos por demora y otros elementos del contrato sensibles al tiempo, puede ser mejor empezar y terminar los contratos el primer y el último día del mes.

¿Qué ocurre si un inquilino quiere marcharse antes de tiempo? ¿O quedarse más tiempo?

Si un inquilino permanece en la vivienda una vez finalizado el plazo de arrendamiento y el propietario acepta el alquiler de ese inquilino, puede convertirse en un inquilino remanente con derecho a ocupar la vivienda en virtud de un nuevo plazo de arrendamiento. Asegúrese de que su contrato de alquiler contempla adecuadamente esta situación para evitar tener que desahuciar a un inquilino que no quiere irse. El contrato de arrendamiento suele estipular cuándo el propietario o el inquilino pueden rescindir el contrato de arrendamiento y la notificación que se requiere.

Normas de ocupación

Hay una serie de cuestiones que van más allá del precio y la duración del alquiler que merecen atención en el documento de arrendamiento, tanto para evitar conflictos de forma proactiva como para proporcionar una protección jurídica adecuada en caso de que acabe ante un juez.

Muchos propietarios no saben que pueden incluir cláusulas en el contrato que les protejan del abuso de la propiedad por parte de los inquilinos. Por ejemplo, puede exigir a los inquilinos que mantengan el césped, que utilicen almohadillas de fieltro bajo los muebles para proteger los suelos de madera y que los invitados se quiten los zapatos. Añadir detalles específicos a las condiciones del contrato de arrendamiento es una parte importante de la protección de su propiedad. A continuación se indican otras áreas comunes que quizá desee abordar en su contrato de alquiler.

• Normas sobre compañeros de piso, invitados y subarriendo de la vivienda de alquiler
• Ordenanzas sobre el ruido en los barrios u otras normativas
• ¿Quién es el responsable último del alquiler si hay varios “compañeros de piso” y uno se va de la ciudad?
• Si se va la luz por causas ajenas al arrendador, los inquilinos pueden exigirle responsabilidades por daños y perjuicios, a menos que se especifique en el contrato.
• Qué animales de compañía, incluidas las razas específicas, en su caso, están autorizados a residir en la unidad de alquiler

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Renovación del arrendamiento

Las negociaciones de renovación son muy importantes para su negocio de alquiler, ya que sus tarifas de arrendamiento deben reflejar el precio actual del mercado inmobiliario para obtener un rendimiento óptimo. El proceso de renovación puede dificultar el equilibrio entre el beneficio de tener un nuevo inquilino que pague más y el riesgo de tener mayores tasas de desocupación. La renovación del contrato de arrendamiento también le brinda la oportunidad de establecer condiciones mejores que las de su acuerdo actual. No deje la negociación del contrato de arrendamiento al azar; hable con un abogado proveedor para proteger su inversión inmobiliaria.

Pida a un abogado que revise el contrato de arrendamiento para asegurarse de que su propiedad está debidamente protegida.

Un abogado puede cobrar entre 150 y 400 dólares la hora incluso por un asesoramiento básico. Por eso, la mayoría de la gente no piensa en llamar a un abogado cuando tiene preguntas rápidas o necesita que alguien revise un contrato y le dé su opinión. Eso podría ser un error.

En primer lugar, si utilizas un contrato de alquiler estándar descargado de Internet sin que un abogado compruebe que cumple los requisitos legales de tu estado, podrías tener que hacer frente a consecuencias legales y financieras a largo plazo. En segundo lugar, las empresas de gestión no siempre tienen en cuenta tus intereses porque no son propietarias del inmueble. LegalShield hace que obtener apoyo jurídico diario para proteger sus inversiones inmobiliarias sea fácil y asequible.

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