Acudir a los tribunales puede ser una experiencia intimidatoria. Es importante seguir las normas adecuadas sobre cómo hablar, vestirse y comportarse ante un tribunal
No seguir el protocolo adecuado en la sala de vistas podría tener un impacto negativo en el resultado de su caso. Si necesita asistencia jurídica, llame a su bufete de abogados proveedor de LegalShield.
- Escucha a tu abogado. Su abogado puede tener experiencia de primera mano trabajando con el personal del tribunal y con el juez que verá su caso. Algunos jueces pueden tener normas no escritas o preferencias sobre el comportamiento en su tribunal. Siga los consejos que le dé su abogado sobre su aspecto y comportamiento en la sala del tribunal.
- Lleve ropa de negocios. Vestir bien demuestra respeto por el tribunal y el juez. Para los hombres, lo apropiado es llevar la camisa por dentro, corbata y pantalones. Las mujeres pueden llevar un vestido o una blusa con falda o pantalón. Su atuendo debe ser conservador, no se está vistiendo para una fiesta. Evita mostrar piel o llevar ropa llamativa. Algunos tribunales incluso tienen códigos de vestimenta y no le permitirán entrar en la sala si no sigue el código de vestimenta. No cumplir con los requisitos del código de vestimenta puede hacer que llegue tarde o incluso que falte al tribunal. Pregunte a su abogado o llame a la secretaría del tribunal para averiguar si existe un código de vestimenta.
- No lleve su teléfono al juzgado. La mayoría de los tribunales no permiten que nadie que no sea abogado, agente de la ley o personal del tribunal lleve teléfonos móviles u otros dispositivos electrónicos al tribunal. Aunque los teléfonos estén permitidos, hay pocos momentos más inapropiados para que suene un teléfono que durante una vista judicial. Tampoco envíe mensajes de texto ni juegue mientras espera a que le llamen.
- Llegue pronto al tribunal. Llegar tarde o no comparecer ante el tribunal puede tener graves consecuencias legales. Si, por cualquier motivo, llega tarde al tribunal, debe disculparse y presentar una excusa válida y, preferiblemente, verificable. Lo mejor es disponer de tiempo suficiente y llegar pronto.
- Espere pacientemente a que se vea su caso. Si hay muchos casos en la agenda del tribunal, es posible que tenga que esperar algún tiempo a que el juez le llame a comparecer ante el tribunal. No hable con los que le rodean, no se muestre impaciente, no duerma ni cause ningún tipo de perturbación en el tribunal. Es posible que no le interesen los demás casos que tiene ante sí el tribunal, pero no está de más fingir lo contrario.
- Sea amable y cooperativo con todo el personal del tribunal. Los secretarios, alguaciles y otros administradores judiciales conocen a los jueces y trabajan en estrecha colaboración con ellos. Ser descortés con ellos no le ayudará en su caso.
- Diríjase al juez sólo cuando se dirija directamente a él. Diríjase al juez como “Señoría” y hable de forma educada y pausada. Hablar fuera de turno o interrumpir al juez, a los abogados o a otros testigos, aunque no esté de acuerdo con lo que dicen, no le ayudará en nada. Aunque los jueces deben pronunciarse únicamente sobre el fondo del asunto, el comportamiento y la conducta pueden influir en el resultado.
- Controla tus emociones. Sonríe y espera pacientemente mientras los demás hablan. Deje que su abogado argumente el caso. No pongas los ojos en blanco, no hagas ruidos de exasperación ni hables en tono sarcástico, agresivo o amenazador. Si el tribunal no falla a su favor, mantenga la calma. Hable con su abogado después del juicio para averiguar si tiene otras opciones legales.